De la mano de Cañas

El letón Ernests Gulbis consiguió el segundo título de su carrera al derrotar al local Mardy Fish por 5-7,6-4,6-4 en el ATP 250 de los Ángeles.

Se hace inexorable revisar los archivos para entender de lo que es capaz Gulbis. De los últimos 4 torneos, en todos  tuvo que despedirse en primera ronda, simplemente no tenía ganas de jugar; Blaz Kavic, James Blake, Adrián Mannarino, Dmitry Tursunov  fueron algunos de los rivales que aumentaban la crisis de “La Gaviota”  y sin contar todas las derrotas anteriores al inicio de la temporada.

Para entender mejor lo que pasa por la cabeza de este espectacular jugador habría que recurrir a una de sus tantas frases como: “Si estoy en uno de mis días le puedo ganar a cualquiera, pero si no lo estoy simplemente cualquiera me puede derrotar”. “Me lo paso bien saliendo por la noche, no puedo estar pensando siempre en el tenis”. Esa es la esencia, el néctar de Gulbis.

Después de derrotar a uno de los favoritos del torneo como lo era Juan Martín Del Potro 6-2,6-4 en cuartos de final entendió que tenía una gran oportunidad, quería repetir el único título de su carrera, también en Estados Unidos, pero en Delray Beach y ante Ivo Karlovic en el 2010.

El ahora ser entrenado por el argentino Guillermo Cañas puede ser el comienzo de algo grande para el rigués, un cambio de mentalidad, de actitud, de costumbres, en definitiva, un cambio de vida. Ese giro de 360º que necesita su tenis, que merece su tenis, ya es hora Gulbis, ya es hora.